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El cortejo y matrimonio La caza de un marido en Inglaterra de la Regencia era un serio familias empresariales y de clase superior invertido grandes sumas de dinero para dar a sus hijas una "temporada" en Londres. Una mujer sin ataduras tenía ninguna ocupación que no sea para encontrar un marido, pero en ningún caso debe que indicar que esta era su objetivo. Fue el hombre que quiera una esposa que debe hacer el trabajo de la persuasión y el ganador de acuerdo con un estricto código de conducta. El código protege la reputación de la mujer, sino también impidió que el hombre de quedar apresados en contra de su voluntad. Las prohibiciones puestas sobre los solteros eran muchos. Antes de un combate, las parejas no podían conversar en privado o estar solo en una habitación, viajar sin acompañante en un carruaje, llaman entre sí por su nombre de pila, se corresponden con o dar regalos unos a otros, bailar más de dos juegos juntos en cualquier noche o el tacto íntimamente - y que incluía un apretón de manos. Saludo y dejar que tomaron fueron reconocidos con una ligera inclinación de la cabeza o reverencia. Así, en un período en que la corrección fue tan estrictamente vigilado, ¿cómo llegó el cortejo jamás progreso? Formas y medios existían para los hombres jóvenes y mujeres para interactuar e intercambiar sonrisas, suspiros y rubores devenir. bailes privados y públicos fueron ensamblados oportunidades ideales para parejas que se juntan. Las manos enguantadas se podrían celebrar brevemente durante la danza y al caminar hacia y desde un conjunto. Bajo la atenta supervisión de sus mayores, los jóvenes y solteras podían mantenerse en pie unos con otros, demostrar su gracia, su capacidad de conversar con inteligencia y su compatibilidad. De manera similar los socios interesados pueden conocer mejor en los paseos carabina en el campo, quedando atrás el resto del grupo si así lo deseaban hablar en privado. Cuando un caballero estaba seguro de sus sentimientos eran correspondidos, que pedirá el permiso de los padres de la dama de pagar sus direcciones. Una configuración adecuada privada para la propuesta podría entonces ser arreglado. Lo más a menudo que sería contestada positivamente ya que era muy mala forma de una dama para fomentar un archivo adjunto que no podía volver. De vez en cuando una propuesta no deseado puede ser realizado a pesar de su falta de aliento, y luego la dama tendría que dar vuelta a su pretendiente hacia abajo, pero siempre con sensibilidad a los sentimientos del hombre. Una vez que una propuesta fue aceptada y se obtuvo el consentimiento de los padres, para romper un compromiso fue considerada muy grave. Un compromiso fue visto como un contrato. Un caballero estaba estrictamente prohibido de romper un compromiso, una vez aceptado y una mujer sólo podía cambiar de opinión después de una cuidadosa consideración. Había reglas estrictas que rigen el matrimonio. Con el fin de casarse legalmente, una pareja necesita una licencia y la lectura de las amonestaciones. También requiere consentimiento de los padres si alguno de ellos eran menores de 21 años y tuvo que ser llevado a cabo en una iglesia o capilla por el clero autorizados de la ceremonia. La única manera alrededor de esto fue la fuga de Gretna Green en Escocia o si eran extremadamente rico, la compra de una licencia especial: emitido por el Arzobispo de Canterbury, que permite a la pareja a casarse a una ubicación que no sea una iglesia. No hace falta decir, ya sea curso de acción era probable para crear chismes intenso y a menudo desagradable. Durante la regencia, bodas eran asuntos mayoría privadas e incluso bodas de moda fueron atendidos con moderación. Ellos no eran ciertamente los grandes asuntos que conocemos hoy o que se hizo más frecuente durante la época victoriana. La novia veces podría vestir de blanco pero no se considera obligatorio. Un vestido de color no significaba falta de pudor, pero era simplemente una preferencia personal.
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